Situaciones en mi pais y que se han de repetir en muchos de los países latinoamericanos me ponen a meditar sobre el ¿por qué somos tercermundistas?, ¿por qué somos pobres.?

Mirando, viendo e investigando me encontré con algo interesante. Paises que realmente son “pobres” son potencias mundiales y países “ricos” sus habitantes viven en la pobreza. Un ejemplo clásico es Japón. No tienen recursos naturales, ni minerales es más no han inventado nada. Más sin embargo son potencia. En cambio Colombia tiene una de las mayores fuentes hídricas, una riqueza inigualable de bio-diversidad, grandes fuentes de recursos minerales. Lo tenemos todo, pero aún así somos un país pobre.

Se que de pronto me van a discutir sobre japón, así que bueno hablemos de Israel. Un país que está en un completo desierto, sin recursos naturales ni minerales. Sin embargo podemos encontrar unos datos interesantes:
  • Es el País económicamente más avanzado del sudoeste de Asia. 
  • Tiene el segundo mayor número de compañias startup después de estados unidos. 
  • ocupa la posición 22 del producto interno bruto per capita. 
  • Aun con los recursos naturales limitados, se convirtió en autosuficiente y ahora exporta alimentos a otros paises. 
  • Las principales exportaciones incluyen frutas, verduras, productos farmacéuticos, software, productos químicos, tecnología militar, y diamantes; en 2006 las exportaciones israelíes alcanzaron los 42 860 millones Israel es líder mundial en la conservación del agua y la energía geotérmica y su desarrollo de tecnologías de vanguardia en software, comunicaciones y las ciencias de la vida han evocado comparaciones con Silicon Valley.
https://es.wikipedia.org/wiki/Israel#Econom.C3.ADa 

Así que la pobreza no radica en que tanto tenemos. Si no en como sociedad e individuos qué hacemos. Así que no vamos a enfocarnos tanto en el origen de este problema para centrarnos en tips que pueden ayudarnos a salir de pobres. 


Primero dejar de pensar que eres pobre: No se trata de negar la realidad. Un proverbio dice: “Cómo piensa el hombre, así es él”. Y así es. Muchos nacemos con el chip que somos pobres, lo que nos condiciona automáticamente a actuar y comportarnos de cierta manera que no nos deja salir de ésta condición. Si tienes agua dulce en tu casa, ropa, comida, luz y demás, ¡felicidades!  ¡tienes mucho más que otros! Parte de lo que ya tienes, no de lo que no tienes. Porque siempre así seas “rico” hay cosas que no tendrás y otro si. De lo que tienes así sea solo experiencia y conocimiento arranca, inicia, avanza. Si lo que tienes das vas a tener más. 

Deja de culpar a los demás “complejo de victima”: Un pensamiento que nos mantiene estancados en la vida es el complejo de víctima y que los demás son los culpables. Que mis padres, que mi infancia, que mis amigos, que el jefe, que los empresarios, que los ricos y el favoritos de todos, el gobierno. Mientras pienses que son los demás los del error no harás nada por cambiar la situación porque el del problema no seré yo. Por eso déjame ayudarte: Tu vida es tuya, tú eres responsable por ella, no importa qué situaciones vengan, si te apropias de tu vida y tomas acción, saldrás de donde te encuentres.  Así el Gobierno no te ayude, la familia, los amigos. Tu puedes levantarte y Tu puedes hacer cosas en pro de mejorar tu vida. 

Piensa en grande: No es vivir una vida de apariencia gastando lo que no tenemos. Eso va a agravar la cosa. El problema es que como Latinos pensamos en pequeño, el negocito, la casita, la carreterita. Por eso es que por ejemplo nuestras vías viven llenas de trancones. Porque pensamos en apenitas lo justo que necesitamos. Con eso nos contentamos y no crecemos más. Siempre podemos avanzar más, tienes mucho más por hacer y crecer en todos los aspectos de tu vida. No te estanques imagina y avanza, siempre mira cómo ser mejor cada día. 

No busques el atajo, no hagas trampa. Camina en principios: El respeto, la honestidad, la puntualidad, la disciplina, el honrar son cualidades apreciadas como oro entre las personas que buscan crecer. Todo esto genera confianza y excelencia. Si eres confiable, si tus servicios son confiables, si tu trabajo es confiable. Si todo lo haces con excelencia, serás apetecido donde te encuentres. Sea lo que sea que hagas tendrá éxito. 

Se excelente: Excelencia es hacer lo mejor con lo que tienes a la mano. No tienes que tenerlo todo, solo usa lo que tienes. De tus dones, tus talentos, tus recursos. Da lo mejor y un poco más. ¿Por qué las personas prefieren un auto mercedes, un porsche, un aston martin?. Porque son excelentes. Por que su trabajo es de calidad, es valorado y así mismo remunerado. 


Se sabio: El principio de la sabiduría es conocer a Dios. Tiene muy buenos consejos que darte. Entre ellos está, cuida lo que tienes pero no con temor a perderlo sino, no lo desplfarres. Cuida tu salud, tu familia, tu descanso, los recursos naturales que tienes, las personas que trabajan contigo… en fin, cada una de las cosas que tienes apréndelas a administrar y valorar. 

Unirnos: Muchos de los adagios populares se limitan a sacar ventaja por encima de otro. “el vivo vive del bobo”; “ojos que no ven, corazón que no siente”; “papaya puesta papaya partida” .Vivimos desde el egoísmo, donde nos importa nuestro beneficio, sin pensar en que puede afectar a otros. No son todos, pero si está en la cultura latina. El secreto de las sociedades de éxito es el apoyo mutuo. El procurar el bien del otro. Ellos saben que el bienestar del otro es el bienestar propio y prefieren perder a dañar la amistad. Si nos unimos avanzamos y llegamos más lejos que solos; tendremos el apoyo necesario para alcanzar lo que deseamos. Los Japoneses lo saben por eso crecen como sociedad. Pero para que ello funcione debemos cumplir con los puntos anteriores. No hay unidad sin confianza, sin valores, sin ser sabios, con mediocridad y sobre todo atacandonos unos a otros echándonos la culpa. 

Lo tienes todo para ser rico. Para salir de la pobreza. Latinoamérica y mi país, Colombia, tienen absolutamente todo para ser una potencia. Solo necesitamos cambiar nuestro chip y dejar de vivir en nuestra patria boba. (Ver historia de Colombia) 

Si te preció mucho para hacer. Es algo que también debes de cambiar. Todo lo que es de valor tiene un esfuerzo por pagar. 

Por último algo para romper nuestra forma de pensar: 

 “rico no es el que más tiene, sino el que menos necesita para vivir feliz”




Las nuevas generaciones que se están levantando, son generaciones que quieren los privilegios de una relación de pareja pero sin compromisos; sin nada que los ate. En teoría pareciera algo muy beneficioso, disfrutar de todo sin “pago” por ello, sin compromiso. Pero como buenos latinos que solo vivimos el momento, dejando de lado el futuro, perdemos de vista que este estilo de vida tiene sus inconvenientes en los años venideros. 

Somos sociedad. Fuimos diseñados para no estar solos. Por lo tanto necesitamos de alguien a nuestro lado, de una persona que esté allí para levantarnos en nuestros momentos difíciles; alegrarnos cuando estemos tristes; que aguanten nuestros malgenios y defectos. Que al final del día te abrace te soporte y te infunda nuevos ánimos para seguir. Eso es alguien comprometido con nosotros en las buenas y las malas. 

Pero si nosotros mismos no nos comprometemos con alguien, que esté igual dispuesto, a comprometerse con nosotros, ninguna de estas cosas las podremos ver. Siempre, siempre en cualquier momento necesitamos a ese alguien incondicional. Pero si vives sin compromisos, tampoco se comprometerán contigo en los momentos duros. Puede que disfrutes de ciertos privilegios de una relación pero realmente no disfrutarás lo verdaderamente valioso y profundo que es el tener a alguien en tu vida. 

No vivas el engaño de estar acompañado pero en realidad estar solo. Comprométete, vive una relación con significado. Encuentra a esa persona con la que desearías pasar el resto de la vida a su lado sin importar lo que pase y que está desee hacer lo mismo por ti. 

Como primera medida para tener a alguien completamente incondicional es comprometerte con Dios. Conocerlo verdaderamente y Él te extenderá su mano en todo momento y circunstancia. Segundo; cásate; el matrimonio es eso. El matrimonio en esencia es el comprometerte a estar en todo momento, en especial en los malos, con tu esposo o esposa, sabiendo que también vas a recibir el mismo compromiso. 

No hay nada mejor que tener a alguien a tu lado. En primera instancia Dios, pero luego de Él, a tu esposo o esposa y saber que pase lo que pase tienes a alguien que te de la mano, un abrazo, un hombro y luchar ante la vida juntos. 

Una relación sin compromiso no es relación. Es un cascarón vacío. No te va a alimentar para nada. 


Muchos solo anhelamos que sea viernes para salir de nuestro trabajo y no quisiéramos que nunca llegue el lunes. Vivimos así semana a semana. ¿Podrían cambiar las cosas?.¿Algún día sera distinto? 

Claro que si. De ello depende dos factores la actitud y la pasión

La pasión es la gasolina, el impulso para tu vida. Sin pasión no hay movimiento. Es la que a pesar de dificultades y problemas te hace seguir, persistir hasta el final ¿Cómo obtener pasión? Fácil. Haciendo lo que te gusta; lo que disfrutas. Imagina lo que quisieras hacer el resto de tu vida y no cuenta hacer pereza. Encuentra algo que quieras lograr y alcanzar y mira cómo por medio de tu trabajo vas a ver materializado aquel sueño. 

Si estás sin pasión: Es muy posible que te encuentres trabajando en algo para lo que no fuiste diseñado. Si es así busca alinear tus gustos, dones y talentos con tu trabajo. Dependiendo que tan distintos sean puede dificultarse un poco pero no es imposible. 

Revisa tu actitud. Es una disposición mental positiva o negativa hacia algo o alguien.  Con una mala actitud todo será malo, con una buena actitud todo sera bueno. ¿ cómo ajustar la actitud? Fácil. Mira siempre lo positivo de las cosas. Analiza los beneficios que te brinda lo que haces en la actualidad. A quienes beneficias o ayudas con tu labor. Cuando vemos que nuestro trabajo hace parte de una obra grande con beneficios no solo para ti sino para otros; vas a vivir con mayor satisfacción y tu actitud va a ser positiva. 

Por último y lo más importante: llénate de visión. Ya sea la de tu empresa, jefe o la tuya propia. Una visión te impulsará y llenará de la pasión que necesitas para disfrutar tu trabajo. Ayudándote a mantener una actitud correcta frente a todas las situaciones y lo que haces. Con ese impulso gozarás tu trabajo y no solo tratarás de sobrevivir día a día. 



Desde pequeños escuchamos que no hay que dejarse Humillar, que no hay que humillar a la gente. Viene a nuestra mente la imagen sobre una persona tratando mal a otra, abusando y vulnerando sus derechos. 

Hemos vivido en un engaño,Humillar, no es lo que todos creemos, no es lo que el adagio popular dice. Humillar en vez de ser un acto malo es algo que necesitamos vivir y practicar con nosotros mismos.  ¿Suena loco? si tomamos lo que vemos según lo que nos ha dicho el contexto cultural, sí, pero la verdad es otra . 

El diccionario dice que Humillar es:
1. tr. Inclinar o doblar una parte del cuerpo, como la cabeza o la rodilla, especialmente en señal de sumisión y acatamiento.
2. tr. Abatir el orgullo y altivez de alguien.
3. tr. Herir el amor propio o la dignidad de alguien.
5. prnl. Hacer actos de humildad.
7. prnl. desus. Arrodillarse o hacer adoración.

Como podemos ver es algo completamente distinto a lo que imaginamos. El humillar ayuda a quitar la altivez y el ser orgullosos cuando nos creemos más que los demás. Nos ayuda a recordar como vimos en el anterior post que somos iguales, con dones distintos pero con defectos también. Que venimos de la tierra y a la tierra volvemos. 

Nos ayuda a la obediencia. Cuando no queremos acatar. Cuando somos desobedientes. En especial cuando somos niños y adolescentes.

Nos humillamos cuando dejamos nuestra propia comodidad y egocentrismo y extendemos nuestra mano para ayudar a otros.

Cuando nos humillamos nos hacemos mas humildes, mas agradecidos, dejamos de lados egos que nos limitan y podemos sacar todo nuestro potencial beneficiando a quienes nos rodean. Ayudándolos a crecer porque no tenemos egoísmos y orgullos que busquen apocar a las personas para nosotros ser exaltados. 

Reconocemos y agradecemos a Dios porque entendemos que por Él es que somos y tenemos lo que tenemos. 

Como podemos ver necesitamos un mundo humillado. Necesitamos ser humillados.




Muchos confundimos ser humilde con ser pobre. Cuando su significado es distinto.


Humilde.

Del lat. humĭlis, con infl. de humildad.
1. adj. Que tiene humildad. Apl. a pers., u. t. c. s.
2. adj. Que vive modestamente. Apl. a pers., u. t. c. s.
3. adj. Dicho de una cosa: baja (‖ de poca altura).
4. adj. Carente de nobleza.

Dos de sus significados me llaman su atención. Tiene humildad y vive modestamente. Es decir que humilde habla de poseer una cualidad de humildad y un estilo de vida moderado. Veamos cada significado.

Modestia
Del lat. modestia.
1. f. Virtud que modera, templa y regla las acciones externas, conteniendo al hombre en los límites de su estado, según lo conveniente a él.
2. f. Cualidad de humilde, falta de engreimiento o de vanidad.
3. f. Pobreza, escasez de medios, recursos, bienes, etc.


Humildad
Del lat. humilĭtas, -ātis.
1. f. Virtud que consiste en el conocimiento de las propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con este conocimiento.
2. f. Bajeza de nacimiento o de otra cualquier especie.
3. f. Sumisión, rendimiento.

Como podemos ver, humilde es alguien que se reconoce y es consiente que también tiene limitaciones y debilidades. Por lo tanto no es altivo, no se cree mas que los demás. Por el contrario tiene templanza y dominio propio en pro de actuar correctamente. Humildad viene de humilitas y este de humus que es tierra. Lo que me dice que es alguien que entiende que todos incluso él viene de la tierra y volverá a la tierra siendo consciente que no es menos ni más que otro.

Si comparamos esto con muchos. Pobres y ricos pueden o no ser humildes. Hay pobres arrogantes, altivos orgullosos y con cero dominio propio. Ser humilde no es ser pobre. Es una cualidad y estilo de vida de todos debemos profesar.

Sueña, sueña; que nadie arrebate tu sueño. Porque el mundo ha sido construido sueño tras sueño. Quienes soñaron con volar lo vieron lograr. Quienes soñaron comunicarse ahora tienen los celulares.

Todo. Lo que veas creado ha partido de alguien que lo ha soñado. El carro, el celular, el baño. Cualquier cosa hasta lo que estás leyendo alguien la soñó. La dibujó en su mente y lucho por hacerla realidad.

Los que quieren apagar sus sueños es porque ellos dejaron de intentarlo. Apagaron su ímpetu y desertaron. Dejaron en el anaquel de su mente aquel sueño que los llenaría de pasión.

Aquí está el secreto: En pasar la barrera de la frustración. Vas a fallar, te vas a equivocar, vas a sentir que no avanzas, que no tiene sentido. Mil fallos puedes tener pero de todas ellas has aprendido y vas a estar más cerca de ver tu sueño realidad.

Cuando sueñas es lo mejor. Llena el tanque de la pasión, cada día te levantas con el anhelo de verlo realidad. Podrá ser tu jornada pesada, pero tu corazón descansará en que avanzas a tu meta.

No te dejes llevar por la mentira que los sueños no se alcanzan que es para unos pocos. Que es mejor tener algo estable y vivir miserable tu vida, con tal de tener un plato, una casa, un carro.



Sigue el ejemplo de grandes soñadores como walt disney, que volvió su mundo magico real. Los hermanos wright y el avión. Steve jobs y la tecnología. Todos soñaron algo y ese sueño los llevó a la grandeza. No por quienes eran o tenían. No eran nadie; ni tenían nada. Pero cuando tienes un sueño tienes todo lo suficiente para avanzar. No te limites tampoco tú por el dinero, el conocimiento, la posición. Solo necesitas un sueño, mucha pasión, evadir la frustración y sobretodo la mano y guía de Dios.

Quiero ver tus sueños hechos realidad.




Hace poco vi una foto de una fábrica de china con una frase que decía algo así: “No fuiste creado para gastar tu vida trabajando”. Es una completa verdad. muchos de nosotros solo hemos vivido tras un escritorio, un computador, una máquina. Nos han vendido la mentira que para ser alguien, para lograr algo, simplemente tienes que invertir toda tu vida en el  trabajo, sacrificando, los hijos, la salud, el descanso… 


Hablando sobre esto, escuche que en una ocasión: un señor que hizo una gran fortuna, al ver que no podía contener toda su riqueza derrumbó sus bóvedas y mandó a construir bóvedas más grandes. Al estar terminadas dijo. Ahora si podre disfrutar de todo lo que tengo, no terminó de decir esto, cuando el ángel de la muerte y le dice: “Tonto, en vano lo has hecho, ¿no sabes que esta noche vengo por ti?”

Tu vida no fué hecha para simplemente gastarla  en trabajar para tener dinero y luego gastar el dinero en cosas para volver a estar sin él y que el ciclo se repita. Aclaro con esto que no digo que trabajar es malo, todo lo contrario, cuando lo haces con los principios correctos traerá grandes beneficios a tu vida. 


Esto me recuerda: que había una vez un gran empresario que estando en sus vacaciones vio a un señor que llegaba de pescar en la mañana y se acostó en su hamaca a disfrutar el paisaje mientras descansaba.  El empresario indignado le dijo: “¿Por qué no sigue trabajando? el hombre le respondió  con otra pregunta ¿ para qué? El empresario con aire de conocedor le empieza a explicar. Bueno pues si trabajara más, podría ganar más dinero, con eso podría comprar otro bote y contratar a alguien, luego de un tiempo e invertir en más botes, podrá construir una gran empresa multinacional de pescado. El Pescador le preguntó ¿ para qué ? el empresario ya molesto le dice:  “ ¡porque cuando ya sea rico y multimillonario entonces podrá dedicarse el resto de la vida a disfrutar en una playa tropical paradisíaca!. El pescador se ríe y le dice ¿y qué cree que ya estoy haciendo?

Volvamos a lo realmente esencial. Imaginemos que pasamos a vivir en una isla deshabitada. Perdería sentido estar afanados por el carro, la deuda, si tengo el último celular, una casa más grande, muebles más lujosos. Muchas de las cosas para las que trabajamos en realidad no son relevantes, por eso: ¿ con qué motivación haces lo que haces? ¿en qué estás invirtiendo día a día tu vida?. 


El trabajo es apenas 1 de 7 de las áreas de nuestras vidas  que debemos cuidar, nos dejes cuando tengas 90 años o una enfermedad que te lleve a la cama; para despertar y darte cuenta que no has vivido, únicamente trabajando.